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El 29 de diciembre de 2024, un avión Boeing 737-800 de la aerolínea Jeju Air se estrelló en el Aeropuerto Internacional de Muan, Corea del Sur, resultando en la muerte de 179 personas y dejando solo dos sobrevivientes.
Este incidente se ha convertido en el desastre aéreo más mortífero en la historia de la aviación surcoreana. Las investigaciones preliminares señalan una combinación de factores, incluyendo una posible colisión con aves, fallos en el sistema hidráulico y la presencia controvertida de una barrera de concreto al final de la pista.
Secuencia de Eventos:
Según informes oficiales, la cronología del accidente es la siguiente:
- 08:54: El control de tráfico aéreo del aeropuerto de Muan autoriza el vuelo 7C2216 a aterrizar en la pista 01.
- 08:57: Se emite una advertencia sobre actividad de aves en la zona.
- 08:59: La aeronave reporta una colisión con aves y declara una emergencia “Mayday”.
- 09:01: Se autoriza a la aeronave a aterrizar en la pista 19, en el extremo opuesto de la pista única del aeropuerto.
- 09:02: El avión toca tierra aproximadamente a un tercio del inicio de la pista, sin el tren de aterrizaje desplegado, deslizándose sobre el fuselaje.
- 09:03: La aeronave sobrepasa la pista y colisiona con una barrera de concreto, lo que provoca una explosión e incendio.
Factores Contribuyentes:
- Colisión con Aves: La tripulación informó haber impactado con aves poco antes del aterrizaje, lo que podría haber afectado los sistemas de la aeronave. Las investigaciones se centran en determinar cómo este evento influyó en la cadena de acontecimientos que llevaron al accidente.
- Fallo en el Sistema Hidráulico: Expertos sugieren que la colisión con aves pudo haber dañado el sistema hidráulico, impidiendo el despliegue del tren de aterrizaje y los flaps, esenciales para un aterrizaje seguro. John Hansman, especialista en aviación del MIT, indicó que esto podría explicar la urgencia de la tripulación por aterrizar.
- Barrera de Concreto: La aeronave colisionó con una estructura de concreto situada a aproximadamente 250 metros del final de la pista. Esta barrera, que albergaba una antena de localización para ayudar en los aterrizajes, ha sido objeto de escrutinio. Expertos en aviación consideran inusual y peligrosa la presencia de una estructura rígida en una zona donde se esperan materiales frangibles que minimicen daños en caso de colisión. David Learmount, experto en seguridad aérea, afirmó que, de no haber estado presente la barrera, el avión podría haber detenido su deslizamiento sin consecuencias fatales.
Debate sobre la Seguridad Aeroportuaria:
La presencia de la barrera de concreto ha suscitado un debate sobre las normas de seguridad en los aeropuertos. Según informes, los manuales del aeropuerto indicaban que la barrera estaba a 199 metros del final de la pista, 41 metros menos de lo recomendado por estándares internacionales.
Además, se había sugerido su reubicación en futuras expansiones del aeropuerto, pero no se habían tomado medidas al respecto.
Expertos señalan que las estructuras en las proximidades de las pistas deben ser frangibles, es decir, diseñadas para romperse fácilmente en caso de impacto, minimizando daños a las aeronaves y aumentando las posibilidades de supervivencia de los ocupantes.
La barrera en cuestión, construida en concreto reforzado, no cumplía con esta característica, lo que ha llevado a cuestionamientos sobre su conformidad con las regulaciones internacionales.
Investigaciones en Curso:
Las autoridades surcoreanas, con la asistencia de investigadores estadounidenses, incluyendo representantes de la Administración Federal de Aviación (FAA) y de Boeing, están llevando a cabo una investigación exhaustiva para determinar las causas exactas del accidente.
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Se han recuperado las cajas negras de la aeronave; sin embargo, el registrador de datos de vuelo sufrió daños, lo que podría retrasar la obtención de información crucial.
Además, se ha iniciado una inspección de seguridad de todas las aeronaves Boeing 737-800 operadas en Corea del Sur, totalizando 101 aviones de seis aerolíneas diferentes. Estas inspecciones buscan identificar posibles fallos mecánicos o de mantenimiento que pudieran representar riesgos similares.
Reacciones y Medidas Posteriores:
El presidente interino de Corea del Sur, Choi Sang-mok, ha ordenado una revisión de seguridad de las operaciones aéreas en el país. Por su parte, Jeju Air ha anunciado planes para aumentar su personal de mantenimiento y reducir sus operaciones de vuelo entre un 10% y un 15% hasta marzo, como parte de sus esfuerzos para mejorar la seguridad.
Familiares de las víctimas se han congregado en el aeropuerto de Muan, exigiendo la pronta identificación y liberación de los restos de sus seres queridos para llevar a cabo los funerales.
Hasta la fecha, cinco víctimas aún no han sido identificadas, y las autoridades trabajan diligentemente en este proceso.
En resumen:
La tragedia del vuelo 7C2216 de Jeju Air ha puesto de manifiesto la importancia de adherirse estrictamente a las normas de seguridad aeroportuaria y la necesidad de revisar y actualizar las infraestructuras para garantizar la seguridad de las operaciones aéreas.
La combinación de factores que condujeron a este desastre subraya la complejidad de la aviación moderna y la importancia de una vigilancia constante para prevenir futuros accidentes.
