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La compañía estadounidense Tupperware, famosa por sus contenedores de plástico, ha anunciado su quiebra. La empresa ha comunicado que buscará autorización judicial para vender su negocio sin cesar sus operaciones.
Fundada hace 78 años, Tupperware se convirtió en un referente del almacenamiento de alimentos, al punto que su nombre se utiliza para describir cualquier tipo de recipiente plástico, incluso de otras marcas. Con presencia en más de 70 países, la empresa no ha logrado reposicionarse en el mercado ni atraer a un público más joven. A pesar de un breve repunte en ventas durante la pandemia, la demanda disminuyó nuevamente después de ese periodo.
El periodista de negocios de la BBC, Peter Hoskins, destaca que el incremento en los costos de producción, salarios y transporte ha afectado gravemente las ganancias de la empresa. Esta semana, las acciones de Tupperware cayeron más del 50% tras el anuncio de su quiebra. Actualmente, la compañía está negociando con sus acreedores cómo gestionar su deuda, que supera los 700 millones de dólares (aproximadamente 3.800 millones de reales).
El año pasado, la empresa ya había advertido sobre su posible quiebra si no lograba recaudar fondos de manera urgente. Laurie Ann Goldman, directora ejecutiva, afirmó que las dificultades financieras de la empresa se deben a un entorno económico global adverso.
El auge de las ‘fiestas Tupperware’:
La marca fue creada en 1946 por Earl Tupper, un químico que patentó los recipientes herméticos. Sus productos de polietileno, resistentes al aire y al agua gracias a sus tapas de doble sellado, inicialmente no tuvieron éxito en los grandes almacenes, ya que los clientes no comprendían bien su uso. Acostumbrados a envases de vidrio y cerámica, les resultaba complicado adoptar el nuevo método de Tupperware, que requería extraer el aire del recipiente para sellarlo correctamente.
La comerciante Brownie Wise fue clave en el éxito de la marca, al introducir la idea de las “fiestas Tupperware”, eventos en los que las vendedoras, en su mayoría mujeres, ofrecían los productos en reuniones sociales en los hogares. Este enfoque ayudó a que la marca creciera rápidamente, permitiendo además que muchas mujeres ganaran un ingreso extra. Sin embargo, en 1958, tras diferencias con Tupper, Wise fue despedida. Aunque demandó a la compañía y recibió una compensación, su salida marcó un punto de inflexión.
En años recientes, Tupperware ha intentado reinventarse vendiendo sus productos tanto en línea como en grandes superficies como Target, y ampliando su catálogo con utensilios de cocina innovadores, como una parrilla diseñada para microondas.
El fin de una era:
Sin embargo, estos esfuerzos no lograron revertir la situación. “La fiesta terminó hace mucho para Tupperware”, señala Susannah Streeter, directora de mercados en Hargreaves Lansdown. Los cambios en los hábitos de consumo, con una mayor preferencia por soluciones más ecológicas para el almacenamiento de alimentos, alejaron a los consumidores de los plásticos.
Neil Saunders, de la consultora GlobalData, comenta que Tupperware no ha sabido adaptarse a los tiempos, ni en sus productos ni en su distribución. El modelo de ventas a través de fiestas ya no resuena con las nuevas generaciones, y los clientes más antiguos también han modificado sus preferencias.
Además, las restricciones por la covid-19 en China afectaron gravemente la distribución de productos, y los errores en los informes financieros de 2021 y 2022 deterioraron aún más la confianza en la empresa.
Fuente de la noticia: BBC News.
